Mi familia está a dieta… y yo qué culpa tengo?
Como saben algunos, hace tiempo estuve a dieta y me funcionó. Nunca dije que disfruté de las verduras al vapor, de comer sin tortilla, olvidé los sabores dulces de las golosinas y degustaba varias frutas al día. La Coca cola la suplía con agua simple y sólo una vez a la semana podíamos romper la dieta: el dichoso “regalo de bienestar”.
Estos días he querido ir al cine y no se ha podido, el pretexto de hoy es que se soltó la lluvia. Tengo ganas de ver la peli de Jeniffer Garner, quiero pasar un buen rato con una cinta entretenida. Si todo sale bien la veré antes de mi cumple.
El viernes haré mi intento por comprarme mi regalo de cumpleaños: un teléfono celular. Verán, tengo uno que mi madre no usa, pero en el sol no puedo ver la pantalla, se descarga muy rápido y es muy básico en sus funciones (aún más que el que tenía). El que quiero tiene recepción Wi-Fi, es Touch, una cámara de 3.2 megapixeles y un diseño muy chido. Si todo sale bien, podré adquirirlo con el compromiso de poder pagar las mensualidades (en fin, quién sabe cómo lo haré).
Ya no quise hacer un wishlist porque pensé que no valdría la pena. Creo que si quiero algo en verdad, tendré que comprármelo yo mismo y no molestar a los demás con algo. Aparte, creo que este año me podré conformar con las chelas el sábado y una comida el domingo. Yo sólo espero que todo salga bien. Sería bueno tener una pequeña satisfacción para terminar bien en mes cumpleañero.
Creo que no puede pasar tiempo sin que escriba en otra web, sobre todo de fútbol. Me invitaron a escribir en La Pelota Rueda. Ya está mi primer post, en el que hablo de estos años desastrosos del Cruz Azul. Necesitaba un espacio para vaciar mis inquietudes futboleras y gracias al blog tengo ese espacio. Sigan el blog, me gusta y trataré de escribir seguido.
Alguien en twitter leyó el post anterior y me mandó un DM diciendo “qué bueno que ya tienes novia”, ya le expliqué toda la onda de lo que escribí. A decir verdad me encantaría que no fuera una equivocación. No, el Gerson de la Tierra-2 es tan diferente a mí, traté de que se leyera lo más real posible, aunque mis sueños son más grandes y todavía más locos. Leo a algunos jóvenes por la web 2.0 y me recuerdan a mí a su edad, esas ganas de conseguir sus metas, de arriesgarse y yo me siento viejo. Sería mejor para mí llevar la edad y las circunstancias con aquellos pensamientos que tenía antes del “nada vale la pena”.
Nos vemos en el futuro.
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