lunes, marzo 19, 2007

OJO DEL HURACÁN EMOCIONAL

Son tiempos muy extraños…

Tiempos en que tus amigos están lejos y te vas con otros nuevos, que recoges la cosecha en donde no sembraste y la siembra propia se pudre, tiempos extraños en que los días de descanso es donde más te cansas, donde el amor se apaga y sale unas formas bizarras que quieren sustituir al sentimiento que mueve al mundo.

A veces creo entender perfectamente a la vida, a veces me da sorpresas y en muchas otras me da la impresión de no saber nada y estar perdido en una tierra que no es la mía. Aunque de cierto modo todo este remolino de sensaciones me parece natural, a veces me gustaría no estar en un “ojo del huracán emocional” que no me deja disfrutar lo que me acontece en la vida .

Mañana regreso al trabajo y no sé cómo me vaya, creo que irme a la hora el día antes del puente me traerá problemas siendo que llegué media hora después del momento de la entrada. Estoy dudando seriamente durar el año, que es lo que deseo, para tener aguinaldo y vacaciones. Intento mejorar en el trabajo pero siento en ocasiones que no puedo.

Es raro cómo, tanto el amor como el desamor pueden crear estructuras de “cómo debe ser la vida”, nos quita toda perspectiva para dejarnos sólo una, privándonos de oportunidades y aprisionándonos en una ruta, no importa si es correcta o no. Es algo que me da mucho miedo, uno tan terrible de abandonarte a ti mismo, sin salvavidas, sin segundas oportunidades… sin salida.

Recuerdo que estoy sintiendo muchas cosas que sentía cuando no trabajaba, por lo que ahora sé que no era el desempleo, eran ondas de la bipolaridad. A veces tengo esa capacidad de que las cosas que leo o escucho, ajenas a mí, me afecten en mi estado de ánimo… quizá sea el cansancio que todavía tengo del Jarra tour.

Es tan difícil vivir en un mundo sin amor, en el que éste se ha vuelto más frágil de lo normal, en el que la gente tiene miedos justificados a darlo todo y otros más a perder lo poco que tienen. Yo solo no puedo romper con tanto, yo solo no puedo ir contra la corriente.

Creo que lo que me resta hacer es buscar una manera de resolver los pendientes e mi vida: mi corazón, mi trabajo, mi carrera, mis amigos y mi tiempo. Hacerlo de la mejor manera posible, buscando forjarme un buen presente, donde no tenga que andar pensando en cosas que no valgan la pena.

Sí, creo que necesito dormir.

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