sábado, marzo 12, 2005

EN MI SOLTERÍA ME HE DADO CUENTA QUE...

... gracias a Dios no tengo problemas sentimentales, o por lo menos no con alguien y que esas son de las cosas que no te dejan vivir, que mi vida ya tiene suficientes contrariedades como para preocuparme por una pareja sentimental, con sus problemas, traumas y otras imperfecciones.

Digo esto porque en los últimos días le he estado haciendo de psicólogo con mis amigos, con Leonardo y Mabel. Ellos viven en distintas partes y los conocí en diferentes etapas de mi vida, Mabel es una de mis mejores amigas de la prepa y Leo es mi mejor amigo de la Universidad. Los dos tienen pareja, y un buen de problemas existenciales.

En mi vida no he conocido a nadie (excepto yo, jejeje) que no tenga problemas con sus respectivos "peor es nada", desde un simple desacuerdo hasta las broncas más canijas que involucran mentadas de madre y cosas que lesionan el alma. No sé por qué las relaciones interpersonales son tan complicadas, un sí o un no son las palabras más difíciles de decir y son las que más problemas podrían resolver.

Ellos aunque no se conocen, tienen algo en común, la insatisfacción... en diferentes niveles, unos insconscientes y otros tan sórdidos como las bocinas de un sonidero. Un factor determinante es lo que uno da en la relación, a veces no es suficiente, algunos buscan eso por otro lado, y otros siguen esperando a que les den...y ahi siguen.

¿Acaso no le damos una dimensión real a los noviazgos? Estos tiempos definitívamente ya no son como los de nuestros antecesores, el amor quizá es algo que no tomamos mucho en consideración; sin embargo es algo que necesitamos, en mayor o menor medida. Si alguien se junta con otro alguien, los dos generan espectativas de lo que pudiese ser, y por lo regular uno espera pasársela bien, digo, no es para pasar momentos desagradables... o sí?

Antes, y sobre todo cuando andaba en secundaria y en preparatoria, me moría por tener a alguien, creía que todo sería maravilloso..pero no contaba con que las relaciones de noviazgo tienden a ser complicadas, y creo que el destino me ha puesto en la posición de observador por algo.

No digo que mis amigos sean afortunados por tenner una relación y yo no, sólo que gracias la posición que tengo, puedo conocer qué onda con esas broncas... digo, nadie escarmienta en cabeza ajena, pero uno si se puede formar un buen criterio.

Imagínense, si de por sí tengo broncas con lo de mi tésis, mi casa y el francés, las broncas de mis cuates, imagínense sumar más broncas con una chava... quizá lo que necesitamos es lo que me dice mi amiga Mabel: ... algo que nos motive, un aliciente, algo que nos levante.

Sin embargo así estoy bien :)

Saludos a los incautos que lean este blog.

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